Desde que en julio de 2009, la floristería estadounidense online 1.800Flowers.com abriese su primera tienda virtual dentro de Facebook, el comercio electrónico dentro de esta red social, F-Commerce, no ha dejado de desarrollarse y evolucionar. Ya en sus inicios, las empresas encontraron en esta red social un entorno propicio para crear y gestionar su relación con los usuarios. Gracias a ello, las compañías ofrecían a sus clientes unos servicios y unos productos más personalizados. Los más visionarios, supieron sacar el máximo partido a este canal que cuenta con más de 500 millones de usuarios.
Basándose en la usabilidad, en la experiencia y en la confianza que la red social había conseguido ofrecer al usuario, algunas marcas aprovecharon la integración social queriendo procurar una experiencia de compra diferente. A partir de entonces, la adquisición de productos o servicios se transformó, a través de Facebook, en una fórmula de recomendación entre usuarios.
El resultado es positivo. El comprador siente que está en un entorno seguro, en el que tiene cierto control puesto que puede comentar el producto que ha adquirido. Además, las empresas han ido desarrollando ofertas especiales y exclusivas para los usuarios de Facebook que a su vez son clientes. No hay que olvidar que es imprescindible conocer en profundidad a la comunidad de usuarios, y estudiar como interactúa con las promociones. Del lado del anunciante, este tipo de comercio permite tener perfiles muy concretos de los compradores, lanzar ofertas de última hora, muy segmentadas, y una actualización constante, eficaz y fácil de los contenidos. La compra debe revelarse como el resultado de la actividad del internauta en la red social, y no al revés.
En España, hay varias plataformas y se desarrollan constantemente herramientas para el F-commerce. Como resultado, encontramos en territorio español varios proyectos exitosos que hacen prever que en los próximos años el F-commerce va a conseguir un fuerte impulso. Uno de los proyectos de éxito con sello español es Herzio.com, que ofrece tres herramientas, a artistas y operadores de la industria musical, para promocionar y generar ingresos en la red social Facebook, ya que da acceso a un público muy numeroso y altamente interconectado por redes de amigos. Otro proyecto nacional es Beetailer.com. Esta herramienta ofrece plataformas para importar las tiendas ya existentes a la red social Facebook y hacer crecer el negocio. Este tipo de nuevas tecnologías aportan innovadoras oportunidades al negocio del F-commerce, en nuestro país.