¿Qué es el Marketing Inmersivo?
El marketing inmersivo es uno de los nuevos términos de moda utilizados para describir un contenido que incluye vídeos, eventos o incluso experiencias. De hecho, junto a él se encuentran el marketing de experiencias y el multisensorial, un complemento perfecto para elevar las estrategias hasta otro nivel.
Algo, a su vez, más que necesario.
Actualmente los usuarios están prácticamente inmunizados ante la publicidad. Por lo que el marketing tradicional necesita un lavado de cara para captar la atención de una audiencia concreta y posicionar a una marca de manera distintiva y original. Pero ¿cómo es eso posible?
Gracias al marketing inmersivo, lograr esto resulta cada vez más sencillo. Sobre todo gracias a las experiencias que se generan.
Las experiencias inmersivas, dentro del mundo del marketing, son la nueva tendencia para conseguir fidelizar clientes. Ni más ni menos.
Verás, cuando una marca realmente quiere calar entre su público, atraerlo, impactarlo y garantizar que éste confíe en su imagen, se emplea el marketing inmersivo. Se trata de lanzar estrategias que consigan generar experiencias que involucren al usuario en un entorno en el que se lleve una buena imagen de la marca.
El usuario, por lo tanto, pasa de adoptar un rol pasivo a ser el protagonista de la experiencia.
No obstante, la cada vez mayor exigencia de los usuarios transporta a las marcas a nuevos desafíos. Ahora, esas experiencias también deben ser enriquecedoras para el usuario. Pero ¿cómo?
Conociendo el marketing inmersivo
El término «inmersivo» cada vez es más común cuando se habla de campañas de marketing efectivas.
Aunque resulta complicado dar con una definición estricta de marketing inmersivo, deberías saber que ese término, generalmente hace referencia a la idea de transportar por completo al consumidor al centro de una historia o experiencia.
En la actualidad, como no podía ser menos, el concepto está vinculado a las nuevas tecnologías. Entre ellas, participan el contenido en vídeo interactivo, la realidad aumentada y la realidad virtual.
Estas tecnologías cambian la forma en la que el usuario interactúa con el contenido. Es decir, en lugar de mirar o visualizar el contenido de forma pasiva, gracias a ellas el usuario interviene en el proceso y siente que es parte de la acción.
Lo mejor de todo es que el marketing inmersivo no es ninguna novedad. Y te has topado con él en innumerables ocasiones.
Los ejemplos más claros de marketing inmersivo
Las campañas de marketing inmersivo te rodean, incluso sin darte cuenta.
Si has querido retocar tus selfies con filtros de Snapchat o Instagram, has usado la realidad aumentada. Si has jugado a Pokemon Go, también has utilizado esa tecnología. Y lo cierto es que la facilidad de uso de estas novedades, que no requiere de un hardware adicional, ha llevado a muchas marcas a subirse a bordo.
1.- Estée Lauder
Por ejemplo, Estée Lauder se asoció con ModiFace para crear un chatbot de barra de labios en Facebook Messenger. El robot de realidad aumentada ayuda a los consumidores a encontrar el tono correcto de lápiz labial. Pero ¿cómo?
Los usuarios únicamente tienen que subir selfies para probar la variedad de tonos antes de realizar una compra.
2.- Meditation Journeys
Considera, por ejemplo, «Meditation Journeys» del New York Times.
Se trata de una serie de experiencias de realidad virtual que transportan a los espectadores a una vista del océano, la sombra debajo de secuoyas gigantes, o una corriente de balbuceo. Cada viaje incorpora meditación guiada.
3.- TOMS
Las experiencias de realidad virtual pueden dar vida a la historia de una marca de una manera más inmersiva. Como es el caso de TOMS.
La compañía de calzado TOMS ha atraído mucho a su audiencia a través de su misión de retribuir a las personas necesitadas. A través de la realidad virtual, la marca pretende compartir cómo impacta de manera más directa. Los espectadores pueden experimentar un TOMS «Giving Trip» a través de un vídeo de realidad virtual online o a través de una experiencia de realidad virtual en una de las tiendas físicas de la marca.
Lo que estos ejemplos tienen en común es la capacidad de poner al usuario en el centro de la historia. Eso es marketing inmersivo.
Al sumergirse en el contenido, los usuarios experimentan la historia de una forma totalmente nueva. Se abre la puerta a una conexión más significativa con la marca.
Entonces, ¿es lo mismo que el marketing experiencial?
La respuesta es no.
Si bien el marketing inmersivo trata de atraer a los consumidores involucrándolos en la historia, el marketing experiencial se centra en fomentar una interacción personal con los consumidores a través de una experiencia memorable cara a cara. Su objetivo, además, consiste en generar emociones positivas y conexiones duraderas entre el consumidor y la marca.
Como puedes imaginar, esas experiencias son más potentes cuando se integran con herramientas de marketing digital. Por eso, a menudo se asocia un hashtag especial con el evento en cuestión, por ejemplo.
Las mejores campañas de marketing experiencial hacen que sea casi imposible no compartirlas en redes. El bar pop-up de Game of Thrones en Washington, DC, por ejemplo, está hecho a medida para Instagram con su decoración elaborada, que incluye un Iron Throne y un albornoz de pieles.
Lo cierto es que las marcas pueden ser increíblemente creativas con este tipo de experiencias del mundo real. La cerveza Carlsberg atrapó la atención de todo el mundo cuando se presentó con un cartel gigante que compartía cerveza gratis. Además, el cartel tenía escrito «probablemente el mejor cartel del mundo«. Y debajo del lema, los visitantes podían probar la cerveza de un grifo.
Con tanto desorden digital, estas experiencias en vivo y en directo funcionan forjando relaciones interactivas entre la marca y el consumidor. La integración con el marketing digital garantiza que los eventos generen rumores mediante el intercambio social.
Ventajas del marketing inmersivo
- Mejora la experiencia del cliente. El marketing inmersivo es ideal para crear compromisos positivos entre el cliente y la marca. Todo esto, ayuda a aumentar la credibilidad y el valor de la marca.
- Personalización. Actualmente no hay estrategia de marketing que no tenga la personalización como un arma fundamental en cualquier movimiento. De hecho, el boom del selfie no es una casualidad. Pone de manifiesto la necesidad del usuario de ser protagonista de todas las experiencias. La tecnología, en este caso, proporciona la opción de trabajar este parámetro. La realidad virtual es la encargada de que las compañías creen contenido personalizado.
- Se crean marcas mucho más fiables. Verás, una marca que aplique el marketing inmersivo y sea interactiva destacará sobre el resto. Al hacerlo, tendrá más posibilidades de retener a su target.
- Globalidad y barreras de idioma. La primera barrera de una estrategia global siempre es el idioma. Sin embargo, el marketing inmersivo en 3D puede ser una solución visual a este tema. El mundo visual es trasversal y no requiere de costes de traducción.
- Se multiplica el volumen de negocio. Como se ha dicho anteriormente, la credibilidad de la marca representa también la popularidad de la misma. Y ésta, también representa su valor. Es decir, cuanto más conocida sea una marca, significará que más apoyo tiene por parte de su cartera de clientes. Y como consecuencia, más elevado será su valor en el mercado ante la competencia.
Los mejores ejemplos para entender el marketing inmersivo
1.- Metro de Madrid
No todas las experiencias inmersivas se basan en la realidad virtual. A modo inspirador, algunos ejemplos utilizan otros sentidos para generar una sensación envolvente en el usuario.
Un ejemplo de ello es la campaña de lanzamiento de la última película de Cazafantasmas: una mañana cualquiera, en una parada de metro cualquiera, se oye sólo el sonido de un metro “fantasma”…
2.- IBM
Aunque no es una verdadera experiencia de realidad virtual, la película, que se estrenó en el Mobile World Congress de Barcelona, permitió que diferentes usuarios se colocasen en el papel del protagonista. Incluso dejó que éstos solicitaran consejos de los espectadores mientras navegaban por la experiencia e intentaban volver a traer la energía a la ciudad.
3.- Sensorium
Además de los auriculares VR, Sensorium incorpora muebles en movimiento, aire frío, aromas de alimentos y muestras de productos para incorporar el sabor a la experiencia.
El marketing inmersivo es sin duda una disciplina que te ayudará a mejorar en la relación con tus clientes. Y con la que conseguirás un nivel de engagement exponencial entre la empresa y los clientes a los que haces participes de vivencias y experiencias que desencadenan emociones. La conexión es tan directa y próxima que si logras llegar al corazón del cliente sin duda conseguirás una fidelización mucho mayor que con otras disciplinas del performance marketing.
