¿Sabes cuáles son los tipos de contenidos adecuados para tus estrategias de marketing digital? Textos, vídeos, infografías, imágenes… son muchos los tipos de contenidos que se pueden elegir. De hecho, dependiendo de la plataforma o medio en el que se comparta, convendrá más uno que otro. No obstante, la clave no se encuentra sólo en adaptar los contenidos al soporte. La clave está en el propio cerebro.
A veces el hecho de adaptar un libro a una película resulta más exitoso que el libro en sí. A pesar de que haya quienes prefieran dar vía libre a su imaginación y crear historias en su mente mientras lee. Pero ¿por qué normalmente triunfan más las películas o los contenidos audiovisuales, en general?
Entran muchos factores en juego a la hora de responder a esta pregunta: Los actores, los efectos especiales, la banda sonora, el ambiente que se crea o la pantalla. Todo influye. ¿La razón? Algunas historias se entienden mejor en formatos concretos. Eso sí, teniendo en cuenta el mensaje que se quiere transmitir.
Decisiones emocionales
La forma en la que el propio cerebro procesa diferentes tipos de contenidos está ligada a las emociones del espectador. De hecho, algunos estudios en Naurociencia aseguran que el 95% de las decisiones que tomamos las hacemos desde nuestra parte emocional.
De hecho, es posible que hayas trabajado mucho en tus campañas. Creas piezas relevantes, seleccionas las keywords, agregas botones para compartirlas en redes… pero no consigues crear engagement. Y no solo eso, sino que los usuarios ni siquiera interactúan con tu landing page.
Con el fin de disipar dudas sobre los tipos de contenidos, aquí tienes un resumen para que conozcas el impacto de cada formato en el cerebro.
La importancia del color en el marketing de contenidos
Ahora que las marcas están haciendo gran hincapié en el marketing de contenidos, la preocupación está en conseguir llegar a los usuarios con esos contenidos. Pero no llegar en el sentido de que los lean, sino de conseguir impactar, conseguir que se interactúe con ellos y se logren conversiones.
Son varios los factores que entran en juego a la hora de procesar la información. Según Natalie Nahai, una psicóloga web, el color es una de las herramientas más determinante a la hora de persuadir. Y más del 90% de las decisiones de compra están condicionadas por factores visuales.
En este campo, el neuromarketing tiene un papel fundamental. Se trata de una disciplina que viene de la neurociencia, pero que estudia las conductas de los consumidores frente a publicidad o contenidos variados. El cliente cada vez es más exigente. Y ya no solo vale con personalizar las promociones o contenidos. La clave para llegar a los consumidores está en entender su mente.
El objetivo de las marcas ahora es llegar a las emociones más subconscientes de los consumidores. De esa manera, se podrá conseguir que los usuarios se detengan, les interese tu contenido y hagan clic.
Estudiar cómo procesa el cerebro de los usuarios los contenidos y cómo estos logran captar su atención es la clave para desarrollar estrategias mucho más eficaces.
Cómo procesa el cerebro los distintos tipos de contenidos
Gracias a los datos que MainPath proporciona, se pueden identificar las diferentes maneras en las que nuestro cerebro reacciona dependiendo de los contenidos que se muestran:
1.- Contenidos escritos
Aunque no lo tengas en cuenta, cuando lees algo es porque realmente capta tu atención. De hecho, conseguir enganchar a los usuarios por medio de textos es una de las técnicas de engagement más difíciles de conseguir.
Requiere un esfuerzo por parte del usuario y una actitud activa. No es como los vídeos en los que solo hay que mirar. Los textos requieren algo más. De hecho, si sigues leyendo este post, es porque estamos captando tu atención o la información que te estamos proporcionando te resulta de valor.
Por lo general, los tipos de contenidos de texto más comunes son:
- Posts en blogs. Los blogs son una técnica que permite que el usuario y la marca creen vínculos. No muestra tanto una actitud promocional, sino que trata de dar un empujón en el proceso de aprendizaje.
- E-books. A menudo incorporan información relacionada con los blogs. Se utilizan como una forma alternativa de volver a proponer el mismo contenido en ocasiones posteriores.
- Estudios de casos. Puede ser una manera inteligente de involucrar a personas que no están dentro de tu target.
- El propio contenido de tu sitio web.
Cuando el usuario lee, el cerebro automáticamente se pone en los zapatos del autor. De hecho, se utilizan diferentes términos para visualizar lo que se describe. Y es que el cerebro humano se activa en el mismo área si lee algo o si lo ve en la vida real.
¿Cuándo utilizar contenidos de texto?
- Para establecer relaciones entre la marca y el consumidor.
- Para hacer hincapié en conocimientos y experiencias.
- A la hora de trabajar el proceso de confianza con el usuario.
- Para medir y comparar tus servicios y productos.
- A la hora de compartir opiniones y reseñas. Aumentará la confianza en el usuario.
2.- Contenidos gráficos
Los contenidos visuales crean mayores recuerdos y ayudan a entender lo que se está mostrando con mayor facilidad. A diferencia de los textos escritos, para el usuario no supone ningún esfuerzo ver imágenes.
Estos son los tipos de contenidos visuales más comunes:
- Infografías. No olvides incluir enlaces a tu página web en ellas.
- Slideshows. Piensa en una presentación cualquiera. Las presentaciones sirven como apoyo. De manera que permite que tu imaginación relacione los contenidos con aspectos con los que los asocia. Así es más probable que se recuerden.
Los contenidos visuales te ayudan a recordar y a entender los contenidos con mayor rapidez. Ya conoces el dicho ‘una imagen vale más que mil palabras‘. Las imágenes se almacenan en el cerebro a largo plazo.
Las imágenes son la mejor opción para:
- La presentación de datos e ideas complejas.
- Atraer la atención y el interés a tu marca.
- Crear contenido memorable.
- Crear contenidos persuasivos.
3.- Los contenidos interactivos
Los contenidos interactivos combinan contenidos visuales, historias y participación. De esta manera activa varias partes del cerebro. Así como con los contenidos de texto el usuario tenia una actitud activa frente al contenido, en este tipo de formato, el usuario está totalmente metido en él. Y esta participación conduce a mayores tasas de retención y aprendizaje.
Los tipos de contenidos interactivos más comunes son los tests y las infografías interactivas. Por simple que parezca, cuando los usuarios contestan a tests, se sienten atendidos al recibir los resultados. Y más si son personalizados.
Este tipo de contenido es muy compatible con las redes sociales. Los cuestionarios, de hecho, son uno de los formatos más compartidos en Facebook. Para utilizarlos, debes tener en cuenta que te vendrán bien en los siguientes casos:
- Para que tu contenido se comparta en redes.
- Al involucrar a un lector en un nivel más personal.
- Para desarrollar experiencias interactivas que serán recordadas.
4.- El rey del contenido, el vídeo
El video es la combinación perfecta de información, imágenes y palabras. Por eso se ha convertido en el gran gancho de internet. Los vídeos son los que mayor conexión emocional lograr tener con los espectadores.
Pero como en el ejemplo que hemos visto al principio del libro y la película, los vídeos son capaces de enfatizar aspectos que despierten más emociones. Desde la entonación al lenguaje corporal o la música… Todos estos factores ayudan a captar la atención del usuario tanto consciente como inconscientemente.
De hecho, el cerebro procesa los vídeos 60.000 veces más rápido que los textos. Visualizar un vídeo no requiere participación activa, por lo que no requiere tanta energía para que el cerebro lo procese.
Son la mejor opción para:
- Compartir historias personales sobre tu empresa, su historia y tu marca.
- Crear vínculos emocionales con el usuario.
- Para aprender: webinars o tutoriales son muy enriquecedores.
Aquí tienes la infografía completa con los diferentes tipos de contenidos:
Las claves del neuromarketing para captar la atención
Ahora que sabes cuándo utilizar cada tipo de contenido, es el momento de aprender cómo sacarle el máximo partido desde la neurociencia. De esta manera optimizarás tus campañas.Algunas ideas que puedes poner en marcha son:
- Crea necesidades de autoservicio. Los seres humanos tenemos un sistema con el que actuamos inconscientemente. Acciones como comer o ir al baño son automáticas. ¿Por qué no intentas crear nuevas necesidades con tus contenidos?
- Enfócate en las emociones. Intenta que tus contenidos incluyan imágenes e historias. Debes despertar la curiosidad y la naturaleza egoísta de los usuarios. Así conseguirás que pulsen tu botón de acción.
- Haz hincapié en los elementos familiares. Es decir, utiliza imágenes, colores o datos que sean familiares para el consumidor. Lo percibirá de otra manera.
- Fácil. Todo lo que los usuarios perciban como algo fácil será más probable que lo procesen con mayor fuerza que algo complicado. Pero no sólo eso, el propio término ‘fácil‘ es sinónimo de alivio. Conseguirás crear más engagement.
- Apela a los sentidos. El 90% de la información que nuestro cerebro procesa es visual. Por lo tanto, intenta que tus contenidos hagan partícipe a cada uno de los sentidos del ser humano. Es decir, que mientras está viendo, por ejemplo, un vídeo, se imagine el olor de lo que se le está mostrando, que sienta texturas…
- Ofrece la solución a los problemas de tus usuarios. Por lo general los seres humanos evitamos sufrir. Por ello, la mejor manera de captar su atención es acercándole a ‘lo bueno‘, al placer. Hacer que se sienta mejor será uno de los retos de tus contenidos. Piensa un insight acerca de algo que pueda molestarle o provocarle sensaciones negativas y trabaja sobre ello ofreciéndole la solución.
- Las recomendaciones aumentan la confianza. No olvides que tus contenidos deben incluir reseñas y comentarios. Todo lo que muestre cómo alguien, sin necesidad de hacerlo, habla bien de tu marca.
La mente del ser humano es una herramienta de la que hay que seguir aprendiendo. Dar con aquello que lleva a los consumidores a tomar decisiones puede evitarte verdaderos quebraderos de cabeza al empezar con tus estrategias de marketing digital. De hecho, lo mejor para desarrollar buenas campañas es contar con plataformas de marketing que centralicen todos tus esfuerzos.
Hoy en día, el marketing de contenidos se ha convertido, por derecho propio, en una parte esencial de cualquier estrategia de marketing digital. Sólo tienes que identificar los contenidos adecuados que tienen que viajar con tu marca. Para lo que es necesario identificar la plataforma de content marketing que conecte tu marca con el contenido. Regístrate como marca en Coobis y comienza a incrementar tu visibilidad en Internet.